En marzo de 2014 y como consecuencia del consenso entre los distintos estamentos que forman el “racinguismo”, se nos propuso la entrada en el Consejo de Administración del Real Racing Club. Cuando recibes una llamada como la que nosotros recibimos, con un encargo inequívoco y claro, solicitando nuestra colaboración para continuar llevar adelante el espíritu del 31 de enero y traerlo justo hasta donde hoy está, no tuvimos ninguna duda.
Aun a pesar de que la situación en ese momento era prácticamente de liquidación de nuestro centenario club, aceptamos tal ofrecimiento, con tres únicos objetivos: cumplir el mandato de la Junta General de esa histórica fecha de presentar la acción social de responsabilidad contra los anteriores gestores; tratar de conseguir el ascenso a la categoría de plata de la Liga, y como no, llevar al Real Racing Club a una ampliación de capital en la que fuese posible que TODOS los racinguistas tuviésemos la oportunidad de formar parte del capital de la SAD en las mismas condiciones, de tal forma que la ansiada atomización fuese un hecho.
El camino hacia lo que ya es un hecho no ha sido sencillo. La situación económica del club era (lo es aún) dramática. Aun con todo y gracias al impagable esfuerzo de TODOS (perdón la inmodestia) los miembros del Consejo, la implicación y el apoyo (a veces también las críticas) tanto de las peñas como de los pequeños accionistas y exf utbolistas, y por qué no decirlo también de casi todos los medios de comunicación, nos ha permitido llegar al día de hoy. La misión para la que fuimos designados consejeros está cumplida.
Y es un acto de responsabilidad, que cuando uno cumple el compromiso adquirido debe dejar paso a savia nueva, que dé un nuevo impulso a los proyectos. Aunque en los tiempos que corren este ejercicio de responsabilidad parece olvidado por muchos, para nosotros es sagrado. Hemos llegado a este cargo para servir de la mejor forma posible a nuestro Racing. Y en este momento la mejor manera de servirle, desde nuestro punto de vista, es apartarnos de la gestión, por lo que de acuerdo con los nuevos propietarios hemos procedido a dejar nuestros puestos para que desde ya mismo éstos puedan hacerse con el mando efectivo del club.
El barco, en destino
La Ampliación de Capital, consensuada con todo el racinguismo, tutelada en todo momento por la Comisión Mixta ha llegado a un venturoso final. El barco, ha llegado al puerto de destino.
En el caso de nuestro centenario Racing, la necesidad de transparencia era máxima. Debía de calar en el racinguismo que ésta era la verdadera y última oportunidad. Y a veces la gestión del club puede requerir de decisiones que pudiesen ser mal interpretadas por el resto de estamentos, por lo que el Consejo decidió que fuesen los representantes de todas las vertientes del racinguismo (accionistas, peñas, ex futbolistas, Fundación) quienes tomasen las decisiones relativas al desarrollo de la misma.
Queremos utilizar estas líneas para mostrar nuestro agradecimiento en esta etapa a todos aquellos que han ayudado a que nuestra labor haya sido llevadera, a pesar de su dificultad y esfuerzo. En primer lugar a nuestro gran Presidente, Juan Antinio Tuto Sañudo, a nuestros compañeros de Consejo David González Pescador y Juanjo Uriel (no queremos olvidarnos en este momento de Serafín Trápaga, quien en su día en un gesto que le honra y engrandece dimitió sólo por evitar cualquier polémica que pudiese lastrar la ampliación). La capacidad de trabajo, la honradez, la preparación y conocimiento son sus grandes valores. De los empleados no deportivos, que decir, trabajando noche y día sin cobrar, sin una mala cara, siempre dispuestos a colaborar. De verdad, gracias a vosotros el club sigue vivo. Respecto a los deportivos, no podemos añadir nada a lo que ya sabemos todos (lo han demostrado tantas veces, tanto en público como en privado). Bendita plantilla, Bendito staff técnico, pasado y actual, benditos responsables del futbol base. Sois el presente y el futuro de este club. Y el resto y no menos importante: aupas, peñistas, ex futbolistas, voluntarios, etc. Vuestro amor al club da sentido a todo lo demás. Aunque a veces hayamos discrepado en asuntos concretos, siempre habéis estado ahí, en las trincheras. Defendiendo al Racing hasta la extenuación. Seguid así por favor. Y por último a nuestras familias, que ha sufrido esta etapa con nosotros, siempre apoyando y comprendiendo los desvelos y el tiempo dedicado.
Gracias también a aquellos que no se han ocupado más que de poner zancadillas y que no han dudado en mentir, malmeter y atacar lo que los demás, la mayoría, hemos intentado hacer para llevar a puerto la nave. Su empecinamiento nos ha servido de acicate en los momentos más difíciles (y ha habido muchos durante nuestra gestión) para sentirnos con más fuerza. A ellos sin duda queremos dedicarles que hoy el Racing sigue con vida porque nuestro éxito es sin duda su fracaso.
Pero lo dicho, lo importante es el Racing, el ya Racing de TODOS los racinguistas, de TODOS los cántabros. Y nos quedamos con esto, sentir que nuestro esfuerzo ha servido para ver un Racing plural, ejemplar y de todos.
GRACIAS Y AÚPA RACING
