La plaza de Amaliach, en Tetuán, contará con alrededor de 50 nuevos árboles y 650 arbustos, incluidos dentro del proyecto ganador del concurso de ideas de microespacios organizado por el Ayuntamiento de Santander y el Colegio de Arquitectos, que se encuentra en ejecución, con una inversión de 321.389 euros.
Así lo ha indicado el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, quien ha precisado que se plantarán 45 árboles “pyrus calleryana” (peral de flor), 3 árboles “acer japonicum” (arce japonés) y 650 arbustos de diferentes especies.
Díaz ha recordado que se trata de una de las cuatro actuaciones previstas dentro de la segunda edición del concurso de microespacios convocado en colaboración con el Colegio de Arquitectos de Cantabria, cuyo objetivo es seguir promoviendo la ordenación de distintos lugares de Santander que, por su reducido tamaño, requieren de soluciones concretas para favorecer su integración y articulación, con el objetivo de ponerlos al uso y disfrute de los vecinos.
“Es una forma de aportar valor añadido, atractivo y modernidad a los barrios y calles de la ciudad”, ha apuntado el concejal, quien ha hecho hincapié en que, de esta manera, se consigue poner en valor estos microespacios que a veces pasan desapercibidos y que, en otras ocasiones, se encuentran infrautilizados o degradados, para dotar de mayor calidad urbana e incrementar la habitabilidad de nuestros barrios.
Díaz ha señalado que, en el marco del desarrollo del proyecto, ya se ha procedido a la demolición de muros, pavimentos y obras de fábrica existentes; a la ejecución de trabajos para la instalación de un centro de transformación y su conexión con la red general, y se ha iniciado el muro que da forma a la plaza en su límite sur.
“A lo largo de estos días, se realizarán los trabajos de construcción de los muros de hormigón sur y norte, el trasplante de 7 árboles, el cambio de ubicación del trasformador eléctrico, así como la excavación y relleno de la plaza y la red de saneamiento, fontanería y canalización eléctrica”, ha agregado el concejal.
El responsable municipal de Infraestructuras ha señalado que es necesario trasplantar algunos de los árboles existentes, para lo cual, por parte de Parques y Jardines, se ha elaborado un informe en el que se hace un diagnóstico y examen de esos ejemplares y se dan unas pautas para realizar el trasplante.
De los 5 plátanos existentes, es necesario trasplantar 3 de ellos, ya que la nueva topografía de la plaza resultante se eleva entre 3 y 4 metros por encima del aparcamiento actual, enterrando estos 3 plátanos. Uno de ellos se trasplantará al parque del Refugio en El Alisal y los otros 2 al parque de Rostrío. Antes de efectuar el trasplante, se llevará a cabo una poda y la preparación del cepellón.
Por otra parte, se trasplantará la palmera ubicada en la zona verde anexa. En este caso, el trasplante es necesario porque la nueva topografía rebaja el nivel actual 1,5 metros, siendo incompatible con la permanencia de la palmera, que se trasladará al parque del Refugio en El Alisal.
Se trasplantarán 2 pequeñas acacias ubicadas en la parte alta de la actual plaza, ya que es necesario rellenar en esa zona aproximadamente 1 metro, y su nueva ubicación serán dos alcorques vacíos en la Avenida de la Constitución (S-20).
Se trasplantará 1 de las 3 encinas como consecuencia de que la nueva topografía rebaja el nivel actual 2 metros, siendo incompatible con la permanencia de la encina, que se ubicará dentro de la misma plaza de Amaliach. Este transplante se efectuará cuando dicha zona este preparada para ello.
Un espacio público, comunitario y de encuentro
La propuesta ganadora del concurso, cuyos autores son los arquitectos Carlos Navarro Chicharro y Héctor Navarro Martínez, que se han encargado también de la redacción del proyecto, es la denominada “Entre valles y cráteres”, que se plantea como objetivo crear un espacio público, comunitario y de encuentro, capaz de reunir distintos grupos sociales de diferentes edades, y conseguir en esta confluencia un lugar que pueda acoger todas estas situaciones haciendo uso del 100% de este espacio urbano.
La superficie total de la actuación es 2.800 metros cuadrados, en los que se ubicarán diferentes áreas estanciales, zonas verdes, juegos infantiles y aparcabicis.
Una de las primeras acciones del diseño se basa en resolver su relación con el entorno, de manera que su entrada por el sur, en la calle Tetuán, se quiere plantear como un límite que invite al ciudadano a adentrarse en la plaza, por lo que accesos y aparcamiento de bicis organizan la entrada.
En la parte oeste, la zona verde existente se incorpora a la propuesta y, a partir de su perfil, se regenera la topografía existente, mientras que los laterales norte y este están diseñados de tal manera que organizan los accesos a las viviendas, teniendo en cuenta la zona de terraza que se ubica en la parte más baja de la calle Amaliach.
La plaza se distribuye en diferentes áreas, a modo de “cráteres” que organizan actividades y circulaciones, y que se materializan de formas muy distintas en función de su uso. Se plantean suelos duros para las zonas de terrazas, suelos de caucho en los parques de juego, otros de césped o uno de ellos ocupado por una instalación de fuentes transitables.
Tal como precisa el proyecto, se generan que pueden ser ocupados por cualquier grupo social, todos ellos pueden servir de desencadenantes de juego para los más pequeños, con la ventaja de que la geometría del propio cráter permite un control visual para los cuidadores.